“CONFRONTAN CEREBRO Y COMPUTADORA”
Marco Freddy Solarte Ruano
Permanentemente sueltan la afirmación de que el cerebro humano funciona como una computadora y, más aún, encuentran gran similitud entre el hardware y el software-; particularmente, me distancio de tales conceptos, aunque los avances sobre la inteligencia artificial y la robótica pudieran crear dudas al respecto.
Pensando “gráficamente”, las neuronas del cerebro humano almacenan distintas experiencias sensitivas con la simplicidad del niño y, ahí, en ese estado, se asocian con las impresiones parecidas, para formar nódulos que continúan acumulándose y relacionándose, por medio de hilos nerviosos haciendo una red que, con el paso del tiempo, aporta lo necesario para entender los elementos lógicos de la significación (9 11 años) y, así sucesivamente, hasta llegar a producir conceptos muy complicados; tal vez a esto, se deba la afirmación de Rodolfo R, Llinás: “el cerebro es una tempestad eléctrica controlada” y, también precisa que “el cerebro utiliza los sentidos para apropiarse de la riqueza del mundo; pero no se limita a ellos; es capaz de funcionar sin ningún tipo de entrada sensorial”; lo que debe entenderse en el sentido de que el cerebro humano tiene la capacidad de crear realidades en un nivel teórico; para luego construirlas, tal como son los inventos.
Siendo que el lenguaje alimenta tales nódulos, por medio de elementos sonoros, transformados en impulsos eléctricos que se relacionan con otras imágenes para conformar los recuerdos; por ejemplo, el olor de un perfume conduce a su nombre y de ahí a la persona que lo usaba y luego a un sinfín de imágenes que, hasta podrían sacar del foco el tema central y crear otro u otros.
En este momento, por ejemplo recuerdo que cuando apenas comenzaba mis estudios sobre la teoría lingüística, creo haber leído (¿?) que esta ciencia, vista desde su componente gramatical (semántica, sintaxis y morfología); es decir con los aportes de la gramática estructural y generativa transformacional, de Noam Chomsky, y con base en los aportes de Leonard Bloomfield, Charlton Laird, Robert M. Gorrell y otros, se dieron las bases para construir las estructuras del lenguaje cibernético y la construcción del alfabeto binario.
Según se sabe, en el año de 1943, en la Universidad de George Town se crearon y armaron los elementos eléctrico-cibernéticos para iniciar semejante descubrimiento de la ciencia; que, si mal no recuerdo, tal mecanismo dizque ocupaba un edifico de cuatro pisos.
También se llegó a saber que tales investigaciones, que deben haber costado inimaginables cantidades de dólares, fueron tomadas del presupuesto de la industria militar; obviamente para los asuntos propios del poder armamentístico.
Entonces, pregunto si, con lo aportado hasta aquí, ¿se habrá confirmado algo sobre la similitud entre las funciones del cerebro humano, con los oficios de la computadora?; de pronto encontraremos un parecido con la memoria; pero nada que se asemeje a la principal característica del cerebro humano: la creatividad, la imaginación, la fantasía. Y ¿qué diremos de las expresiones sentimentales?
De todas maneras, son innumerables las tareas que pueden desarrollar estas computadoras; así como lo son, las labores de los humanos que han sido desplazados por éstas; lo que obliga a reconsiderar aquellas actividades basadas en la simple información que se encuentra sistematizada y, sería una pérdida para alguien que la replicara.
Reitero, la computadora continuará siendo un auxiliar para la capacidad inteligente del ser humano; pero no su sustituto; aunque , en el proceso creativo del cerebro humano están las posibilidades de nuevas invenciones, como antes se explicó; por eso debe mirarse atentamente los avances teóricos y pragmáticos de la inteligencia artificial y la robótica; que por ahora son motivos de las películas de ficción.
San Juan de Pasto,